FACULTAD DE MEDICINA
LICENCIATURA DE MÉDICO CIRUJANO
PSICOLOGÍA MÉDICA. CONTROL DE LECTURA
TEMA 14: Enfermo, médico y las reacciones psicológicas a la enfermedad
2DO PARCIAL
¿Cómo reacciones el paciente cuando sufre alguna enfermedad? ¿Qué sucede
cuando le dicen que tiene que ser hospitalizado o que tiene que ingresar a
terapia intensiva? Las respuestas a estas preguntas se contestaran en el
siguiente ensayo.
Enfermar supone enfrentarse a un mundo hasta entonces desconocido y
negado. Todo individuo cuando enferma experimenta una serie de reacciones
emocionales ante la enfermedad que el médico debe considerar. Existen muchos
factores que intervienen en esas reacciones, entre los que destacan: La
personalidad del paciente, la edad, el tipo de enfermedad, la familia y los
amigos, ganancias secundarias, el hospital, la personalidad del médico y demás
profesionales de la salud.
Sentimientos del paciente ante la enfermedad:
Culpa. El sentimiento de culpa tradicional por el que la enfermedad
sería algo merecido por trasgredir normas fundamentalmente morales. Ha sido
especialmente evidente en las enfermedades mentales, el SIDA. No es un
sentimiento frecuente en la actualidad; en la era de la medicina científica, lo
que puede producir cierta sensación de culpa a algunas personas es no tener
hábitos de vida saludable (no hacer deporte, fumar, comer mal y/o en exceso).
2. Desvalimiento. Regresión a un momento anterior del desarrollo
psíquico. La persona se siente vulnerable y la situación se expresa en
dependencia de otros.
3. Inferioridad. Especialmente evidente en personalidades fuertes, que
cuando enferman viven la enfermedad como signo de debilidad.
4. Ansiedad. Expectación aprensiva (preocupación excesiva e irracional
por lo que pueda suceder). Da lugar conductas de evitación fóbica (el paciente
evita hacer ciertas actividades por miedo).
La hospitalización genera ansiedad en los pacientes.
Malestar: los pacientes se sienten mal, tienen molestias físicas y
psíquicas derivadas de la enfermedad
• Incertidumbre: el futuro personal es incierto. Existen dudas con
respecto a su futuro (bienestar, salud, supervivencia). En muchas ocasiones los
pacientes desconocen el motivo de algunas exploraciones y tratamientos y la
peligrosidad que comportan. El bienestar de los pacientes depende de personas
desconocidas.
• Desubicación: Los pacientes están separados de su entorno: familia y
entorno físico habitual.
La cirugía representa indudablemente un evento estresante para muchos,
alrededor de la cual existen preocupaciones sobre la muerte, dependencia
física, no despertar de la anestesie, el dolor, la enfermedad,
recuperación, separación con la familia, situación económica y laboral y
hospitalización entre otros. Ante todos estos interrogantes, pueden surgir
varias respuestas emocionales; ansiedad, estrés, depresión, que cuando son muy
intensas tienen importantes consecuencias haciendo más lenta y complicada la
recuperación postoperatoria. Cuando la persona presenta un alto grado de ansiedad o estrés, esta
puede afectar la respuesta a las drogas anestésicas, la tensión
arterial o la frecuencia cardiaca, sus heridas demoraran en cicatrizar más, su
sistema inmunológico se debilitará y el post operatorio será más largo.
También puede presentar insomnio, agresividad,
problemas en sus relaciones con el médico o el staff, uso excesivo de
analgésicos, para controlar el dolor y actitudes inadecuadas con respecto
al cuidado de la propia enfermedad.
La cantidad de ansiedad que la persona pueda experimentar y la capacidad
del paciente para manejar la ansiedad en la cirugía depende de: haber sido
testigo o haber experimentado complicaciones quirúrgicas pasadas, duración y
magnitud de la enfermedad, tipo y gravedad de la intervención quirúrgica,
tiempo de preparación previa para la cirugía, capacidad y tolerancia para
soportar situaciones estresantes.
El hecho de que las hospitalizaciones y tratamientos médicos suelen
producir consecuencias traumáticas, resulta sorprender a muchas personas. Las
secuelas traumáticas causadas por una larga inmovilización, hospitalización, y
en particular por las cirugías son a menudo graves y prolongadas. Aunque la
persona reconozca que la operación es necesaria, y de que a pesar de cuando el
cirujano corta la carne, los músculos, y los huesos, está inconsciente, el
cuerpo lo registra como un incidente que amenaza la vida. A nivel celular, el
cuerpo percibe que ha soportado una herida bastante grave como para ponerlo en
peligro de muerte. Intelectualmente tal vez creamos en la operación, pero a
nivel más primario nuestro cuerpo no cree en ella.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
DE LA FUENTE, Ramón. PSICOLOGÍA MÉDICA. ED. Fondo de cultura económica
LÓPEZ, Ibor. Alonso Ortiz. Ibor Alcocer. LECCIONES DE PSICOLOGÍA MÉDICA. Ed. Masson
ELABORÓ: HERNÁNDEZ VALDÉS TOMÁS ENRIQUE Médico Cirujano: Psicología Médica-Grupo: 1